viernes, 24 de abril de 2009

BOLIVIA: CADA AVANCE LE CUESTA UN POTOSI A MORALES

Si bien la lucha entre el gobierno y la oposición se está produciendo en términos más ¨civilizados¨, cada avance le cuesta a Evo Morales jirones de su poder.
El nuevo enfrentamiento entre el poder popular que encarna el Presidente y sus rivales de la Media Luna oriental tuvo como escenario el Congreso boliviano y la Casa de Gobierno en La Paz, donde Evo Morales realizó una huelga de hambre para lograr que el parlamento apruebe la ley electoral.
Finalmente, después de mucha discusión, el proyecto fue aprobado y finalmente el presidente boliviano podrá presentarse a una reelección y los gobernadores tendrán sus estatutos autonómicos. Es así que cerca de fin de año habrá elecciones presidenciales y en abril del año que viene se realizarán los comicios municipales y de prefectos.
La oposición bloqueó el proyecto electoral hasta donde pudo, ansiosa por ponerle palos en la rueda al primer mandatario, y para impedir los avances sociales que contempla la nueva ley, que consisten, entre otras cosas, en aumentar la presencia indígena en el parlamento, lo que va en desmedro del poder electoral opositor, ya que su base social está a años luz de los beneficiarios de esta reforma.
La excusa para trabar el tratamiento en el Congreso era una supuesta adulteración de los padrones electorales que exageraban la representación del oficialismo. Con la nueva ley habrá un nuevo padrón con registros biométricos.
Más allá de los detalles y la resolución del conflicto, Evo Morales debió adoptar una medida extrema para lograr aprobar una ley que consideró fundamental. Se salió con la suya pero pagó con un fuerte desgaste que recién a fin de año sabrá si fue fructífero. Lo cierto es que la crisis financiera internacional puede afectar la actividad económica de todos los países, incluida Bolivia, y Evo necesitará de todo su poder para afrontarla.

martes, 14 de abril de 2009

Arrufat: el sueño de la fábrica de chocolate

El fenómeno más importante, en opinión de quien suscribe, y también el más perdurable que arrojó la crisis del 2001, es el nacimiento de las empresas recuperadas, firmas que ante el abandono de sus dueños, fueron recuperadas por los trabajadores que las pusieron nuevamente en marcha, retomando la producción y conservando las fuentes de trabajo.
Una de las más recientes tomas se registró en enero de este año, más precisamente el 5 de enero. Fue en la fábrica de chocolate Arrufat, cuya dueña y heredera del apellido, debía 9 meses de salarios y los consiguientes aportes patronales. Aún así los trabajadores siguieron produciendo, hasta que llegó el día que Diana Arrufat, puso un cartel en la puerta anunciando que el trabajo se interrumpía hasta nuevo aviso.
Los obreros no dudaron y tomaron la fábrica. Muchos tienen más de 20 años de trabajo y no aceptaron bajo ningún punto de vista perder la fuente de sustento de sus familias. La dueña, sin ponerse colorada, los denunció por usurpación. Ante esta situación los obreros buscaron la ayuda de quienes algo sabían del tema: las otras empresas recuperadas. Es así que gente del BAUEN , Filobatex y otros corrieron en su ayuda.
Pero para hacer esta lucha viable había que retomar la producción, más cuando se venía encima la fecha de pascuas, justo la época de mayor trabajo para el rubro. No tenían luz, por lo que era imposible producir nada. Pero una vez más, la generosidad de una vecina les tiró un alargue, y ahí sí, los trabajadores pusieron manos a las obras.
El delegado Adrian Serrano les contó a Los Sospechosos del Barrio, que se emite en la radio online www.elhuairamuyo.com.ar, que lograron colocar toda la mercadería sin sufrir discriminaciones de ningún tipo. Ahora les resta esperar la resolución judicial que se vislumbra complicada. Pero los trabajadores saben que cuentan con un capital invalorable: su decisión de no rendirse.

martes, 7 de abril de 2009

La Apostasía: una buena oportunidad para abandonar la Iglesia católica

Según las encuestas, en la Argentina casi todos creen en Dios, pero pocos practican los preceptos de la religión mayoritaria: la católica, apostólica y romana. Pese a esto, la Iglesia se arroga la representación de todos los que se definen como católicos aunque jamás presencien una misa. Es así que es una de las instituciones que más presión ejercen sobre los gobiernos.
Pero para los que nunca aceptamos estas imposiciones se abre ahora una posiblidad de abandonar la Iglesia y quitarle parte de su representación: mediante la apostasía se puede pedir que quienes fuimos bautizados contra nuestra voluntad, dejemos de figurar en los registros episcopales. Además ya no se trata de acciones individuales. Recientemente una agrupación llamada ARGATEA, encabezó una campaña de apostasía colectiva bajo el título ¨No en mi nombre¨, que tuvo poca repercusión en los medios pero que logró que miles de personas reclamaran ser borradas de las listas baustimales. Andrés Miñones, integrante de ARGATEA, contó en el programa Los Sospechosos del Barrio que se emite en la radio online www.elhuairamuyo.com.ar, que si bien es verdad que los mismos católicos casi siempre pasan por alto los mandatos de las autoridades religiosas, sería bueno un blanqueo de los registros, para que la Iglesia católica no asuma una representación que no tiene. Si bien el trámite es engorroso vale la pena intentarlo.