jueves, 20 de julio de 2017

La oposición, a todo o nada contra Maduro

Ni mediaciones papales ni diálogo alguno parecen posibles. La oposición venezolana desconoce el mandato de Maduro y no acepta otra cosa que su dimisión, o, en el mejor de los casos, la convocatoria a un referéndum revocatorio.
                El presidente Nicolás Maduro, no fue impuesto de afuera ni salió de un repollo, fue elegido por el pueblo venezolano en 2013  y tiene un mandato constitucional que debería cumplir. Pero no lo entienden así quienes forman la oposición venezolana. Cebados por el triunfo legislativo del 2016, que les dio el manejo del Congreso, no dudaron en embestir a los otros dos poderes, bastiones del poder chavista.
                Frente a esta protesta sostenida en el tiempo, Maduro no ha logrado dar con alguna estrategia que disuelva la protesta. La creciente violencia callejera, llevó a las fuerzas de seguridad a una represión que logró reavivar la lucha. El notorio apoyo externo, con eje en Washington, es un combustible financiero que los opositores están aprovechando sin cargo de conciencia alguno.
                Está claro que Maduro no es Chávez y que la situación lo está sobrepasando.  El chavismo sacó de la galera el llamado a una elección constituyente, que se parece mucho a un último recurso para recuperar la paz en las calles, pero todo indica que nada calmará a un sector social que ha decidido forzar la salida del Presidente

                Aciagos tiempos, para un gobierno que supo ser popular, y que ahora, busca con desesperación, el hilo de Ariadna que lo saque de este laberinto que parece no tener salida.